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Contenido(s)

Diario de Centroamerica / Cultura y Farándula. Pag. 11. Guatemala, lunes 23 de julio de 2007.

Nuestra recomedación de hoy

Los libros, nuestros amigos

Guatemala: Linaje y racismo, Casaús Arzú, Marta Elena. Guatemala: Linaje y racismo. Guatemala: F&G Editores, 2007, 3ra. edición, revisada y ampliada. x + 342 págs. 17.1 X 24.1 cms. ISBN: 978-99922-61-53-8. US$40.00. Q.200.00.

De contraportada: El libro de la Dra. Marta Casaús constituye un aporte importantísimo a las investigaciones de la formación histórica de los grupos dominantes en el mundo subdesarrollado y de sus orientaciones político-ideológicas. Toma como área de estudio Guatemala; rastrea a lo largo de su historia la formación de los grupos dominantes a partir de sus redes de parentesco; identifica sus bases económicas en los distintos momentos de su evolución y las modalidades de vinculación con el poder político colonial y postcolonial hasta llegar a nuestros días.

La reconstrucción histórica de los grupos dominan­tes es el punto de partida para la identificación de la ideología política y del orbe cultural de dichos grupos; hoy, por lo tanto, la autora avanza mucho más que quienes la precedieron en este terreno de estudio.

La descripción histórica es aquí el comienzo de la investigación de la cultura política de los grupos notables de Guatemala, con atención especial a la cuestión étnica. No sólo nos dice quiénes son “los que mandan”: también nos dice qué piensan.

Esta obra de Marta Casaús representa, por consiguiente, un valor de primer orden para el sociólogo y el politólogo; para las investigaciones sobre el desarrollo y para el análisis de políticas.

Carlos M. Vilas.
Prólogo. Primera edición, 1992. "El estudio de los grupos dominantes en sociedades subdesarrolladas se ha desenvuelto principalmente a lo largo de dos grandes vías". Carlos M. Vilas. Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Humanidades, UNAM. 12|1991.

De la autora
Marta Elena Casaús Arzú, Es Doctora en Ciencias Políticas y Sociología. Es profesora titular de Historia de América en la Universidad Autónoma de Madrid. Ha sido investigadora principal en múltiples proyectos relacionados con el desarrollo intelectual centroamericano. Entre sus publicaciones más recientes están: La metamorfosis del racismo en Guatemala (Guatemala: Cholsamaj, 2002), Historia intelectual de Guatemala (Guatemala: USAC-CEUR/UAM), Desarrollo y diversidad cultural en Guatemala (Guatemala: Cholsamaj, 2000), Las redes intelectuales centroamericanas: un siglo de imaginarios nacionales (1820-1920) (Guatemala: F&G Editores, 2005).

Diario La Hora / Cultura, farándula & más. Pág. 22. Guatemala, lunes 6 de agosto de 2007.

 

Presentan libro

Este jueves 9 de agosto, F G Editores presenta el libro "Guatemala: linaje y racismo" de Marta Elena Casáus Arzú, en el marco del VII Congreso de Estudios Mayas.

La presentación se llevará a cabo en el Auditorio del Campus Central de la Universidad Rafael Landívar (Edificio H, segundo nivel), a las 19:00 horas.

Según información proporcionada por F G Editores, el libro constituye un aporte a las investigaciones de la formación histórica de los grupos dominantes en el mundo subdesarrollado y de sus orientaciones político-ideológicas.

Toma como área de estudio Guatemala; rastrea a lo largo de su historia la formación de los grupos dominantes a partir de sus redes de parentesco; identifica sus bases económicas en los distintos momentos de su evolución y las modalidades de vinculación con el poder político colonial y postcolonial hasta llegar a nuestros días.

La reconstrucción histórica de los grupos dominantes es el punto de partida para la identificación de la ideología política y del orbe cultural de dichos grupos; hoy, por lo tanto, la autora avanza mucho más que quienes la precedieron en este terreno de estudio.

La descripción histórica es aquí el comienzo de la investigación de la cultura política de los grupos notables de Guatemala, con atención especial a la cuestión étnica. No sólo nos dice quiénes son "los que mandan": también nos dice qué piensan.

Esta obra de Marta Casaús representa, por consiguiente, un valor de primer orden para el sociólogo y el politólogo; para las investigaciones sobre el desarrollo y para el análisis de políticas.

elPeriódico / Agenda. Pág. 25. Guatemala, jueves 9 de agosto de 2007.

Letras
"Linaje y Racismo"

Marta Elena Casaus presentará el libro Guatemala, linaje y racismo. Comentan: Delfina Mux, Amílcar Dávila y Raúl Figueroa Sarti. Hoy a las 19:00 horas, en el Auditóriu de la Universidad Rafael Landívar, entrada libre.

elacordeón / Sophos. Pág. 8. Guatemala, domingo 12 de agosto de 2007.

GUATEMALA: LINAJE Y RACISMO
de Marta Elena Casaús Arzú

Este libro rastrea, a lo largo de la historia de Guatemala, la formación de los grupos dominantes a partir de sus redes de parentesco; identifica sus bases económicas en los distintos momentos de su evolución y las modalidades de vinculación con el poder político colonial y postcolonial hasta llegar a nuestros días. La descripción histórica es aquí el comienzo de la investigación de la cultura política de los grupos notables de Guatemala, con atención especial a la cuestión étnica. No sólo nos dice quiénes son "los que mandan": también nos dice qué piensan.

Prensa Libre / PERSISTENCIA. Pág. 16. Guatemala, jueves 23 de agosto de 2007.

Xenofobia, limpieza de sangre y sumisión son las claves propias de las familias de “linaje”. ¿Hasta qué punto fueron responsables del genocidio durante la guerra sucia?

 

Un libro extraordinario
Margarita Carrera

Guatemala: linaje y aracismo, de Marta Elena Casaús Arzú, editado magníficamente por F&G editores, acaba de salir a luz. 339 páginas lo conforman, con una bibliografía extensísima, incluido un índice de nombres y cuadros específicos, que lo hace más impecable, además del talento con que ha sido escrito y la valentía de Marta Elena al desvelarnos un mundo hasta ahora poco trabajado por los historiadores guatemaltecos. En el capítulo I: Introducción al estudio de las redes familiares como estructuras de poder de larga duración en Centroamérica, se esboza el contenido del libro que gira alrededor de aquellas familias de “linaje” que han dirigido la historia de Guatemala y Centroamérica desde la época de la Conquista. Tales familias fueron las que, junto a la religión, dirigieron las reglas que nos han venido gobernando: “(...) la importancia que cobran las redes familiares a lo largo de la historia de América Latina y, sobre todo, su vigencia en el presente, para la comprensión e interpretación de la estructura social y del poder de las sociedades americanas, se produce principalmente allí donde existe una presencia de población indígena (...)”. De tal forma que se debe tener en cuenta la importancia que tienen los indígenas que fueron y continúan siendo explotados.

¿Cuál es la razón por la que estas familias se han convertido en núcleos de poder y dominación en Centroamericana? La respuesta está en la España misma, en donde la familia, con sus redes sociales, conformaba, durante la Conquista y la época de la Colonia, las estructuras sociales de poder.

Así, las primeras encomiendas repartidas -1524 y 1530- recayeron en gobernadores y lugartenientes de Pedro de Alvarado, dando lugar a una sociedad cerrada en la que la tierra y el poder se concentraba en los primeros conquistadores y colonos españoles de Santiago de Guatemala. Porque, desde el inicio de la Conquista, la obtención de encomiendas, repartición de indios y títulos de hidalguía se concentraba en descendientes de los conquistadores: “(...) los peninsulares y funcionarios de la Corona parecían los más apropiados para alcanzar este objetivo y borrar con ello cualquier signo de mestizaje o impureza de sangre (...)”.

Me parece oportuno recordar que, una vez expulsados los árabes y los judíos de España, en 1492, los españoles vigilaban drásticamente la “pureza de sangre”; esto es, no tener sangre mora o judía. Ya en América, lo que a los españoles y a sus descendientes preocupaba era no relacionarse con mestizos o indígenas, considerados de raza inferior. De ahí el interés del conquistador en obtener el título de hijodalgo, que garantizaba la pureza de sangre. “Su deseo de autoafirmarse como español o como descendiente de la nobleza española, no sólo por el interés de un título y una encomienda, sino por la necesidad de diferenciarse del indígena y del mestizo”.

Los valores principales que se tomaban en cuenta eran la honra, el ser buen cristiano y el “linaje”. La pureza de sangre justificará los privilegios de los peninsulares y criollos frente a los indios y mestizos. Lipschutz habla de “pigmentocracia” o “espectro de colores”. Lo mismo que el nazismo en su búsqueda y exaltación de la raza aria. Las familias de “linaje” reproducirán la ideología racista y los valores propios de la sociedad colonial hasta nuestros días. “(...) allí en donde el Estado se encoge o pierde fuerza, las redes familiares amplían su influencia y ocupan el lugar del Estado, y viceversa”. Si es así, me pregunto: ¿Hasta qué punto estas familias no fueron responsables -lo mismo que los militares- del genocidio durante la guerra sucia? C. M. Vilas, opina: Casaús “no sólo nos dice quiénes son ‘los que mandan’; también nos dice qué piensan(...)”. Una obra indispensable para el sociólogo y el politólogo.

elPeriódico / Escaparate. Pág. 24. Guatemala, martes 28 de agosto de 2007.

"GUATEMALA: LINAJE Y RACISMO"

> Marta Elena Casaús Arzú

Una investigación sobre la formación histórica de algunos de los grupos dominantes más reconocidos de Guatemala, identificados con nombres y apellidos, a partir de sus redes de parentesco, sus bases económicas y sus diversas vinculaciones con el poder político, desde la época colonial hasta nuestros días. Este libro es también un análisis histórico sobre el pensamiento y la práctica racista en Guatemala, en especial en su oligarquía, que saca sus propias conclusiones.

Revista D / Prensa Libre. Pág. D-29. Guatemala, domingo 2 de septiembre de 2007.

De Linaje y racismo

Nuestra recomendación

El libro de la Dra. Marta Casaús constituye un aporte importantísimo a las investigaciones de la formación histórica de los grupos dominantes en el mundo subdesarrollado y de sus orientaciones político-ideológicas. Toma como área de estudio Guatemala; rastrea a lo largo de su historia la formación de los grupos dominantes a partir de sus redes de parentesco; identifica sus bases económicas en los distintos momentos de su evolución y las modalidades de vinculación con el poder político colonial y postcolonial hasta llegar a nuestros días.

La reconstrucción histórica de los grupos dominantes es el punto de partida para la identificación de la ideología política y del orbe cultural de dichos grupos; hoy, por lo tanto, la autora avanza mucho más que quienes la precedieron en este terreno de estudio. La descripción histórica es aquí el comienzo de la investigación de la cultura política de los grupos notables de Guatemala, con atención especial a la cuestión étnica. No sólo nos dice quiénes son “los que mandan”: también nos dice qué piensan. Esta obra de Marta Casaús representa, por consiguiente, un valor de primer orden para el sociólogo y el politólogo; para las investigaciones sobre el desarrollo y para el análisis de políticas. (Carlos M. Vilas, en contraportada).

Guatemala: Linaje y racismo. Autora: Marta Elena Casaús Arzú. F&G Editores. 342 págs.

Prensa Libre / Cultura. Pág. 77. Guatemala, lunes 3 de septiembre de 2007.

SOCIOLOGÍA

Por: Juan Carlos Lemus

Guatemala: Linaje y racismo, de Marta Elena Casaús Arzú, constituye un aporte a las investigaciones de la formación histórica de los grupos dominantes en el mundo subdesarrollado y de sus orientaciones político-ideológicas. Obra de primer orden para investgaciones sociológicas. 316 páginas. Editorial F&G. Lo encuentra en librería Sophos y por el teléfono 2433-2361.

elPeriódico. Pág. 17. Guatemala, martes 11 de septiembre de 2007.

Los libros más vendidos durante agosto de 2007

SOPHOS

"Las Izquierdas, Rigoberta Menchú, la Historia": Edelberto Torres-Rivas, F&G Editores.

"Fábula del tiburón y las sardinas", Juan José Arévalo, Flacso.

"Manual de criminología": Mike Maguire, Oxford.

"El alma está en el cerebro": Eduardo Punset, Aguilar.

"En la mirilla del jaguar": Margarita Carrera, FCE.

"La catedral del mar": Ildefonso Falcones, Grijalbo.

"El ascenso de las élites industriales en Guatemala": Paúl Dosal, Piedrasanta.

"Guatemala: linaje y racismo": Marta Elena Casaús Arzú, F&G Editores.

"El perfume (historia de un asesino)": Patrick Süskind, Booket.

"La tierra es plana": Thomas Friedman, Martínez Roca.

elPeriódico. Pág. 15. Guatemala, miércoles 10 de octubre de 2007.

Libros más vendidos en septiembre de 2007

SOPHOS

"Guatemala: linaje y racismo": Marta Elena Casaús Arzú, F&G Editores.

"The Art of Political Murder: Who Killed The Bishop?", Francisco Goldman, Grove Press.

"Señores bajo los árboles" Mario Roberto Morales, Editorial Cultura.

"Guatemala, La historia silenciada (1944-1989)", Carlos Sabino, FCE.

"La suma de los días" Carlos Sabino, Fce.

"El secreto", Rhonda Byrne, Atria Books.

"Siete Minutos De Desasosiego", Eduardo Halfon, Panamericana.

"La Cultura, Todo lo Q' Hay Q' Saber", Dietrich Schwanitz, Taurus.

"Las Izquierdas, Rigoberta Menchú, la Historia": Edelberto Torres-Rivas, F&G Editores.

"El tercer patio", Mendez Vides, Alfaguara.

criticasmagazine. 15 de octubre de 2007.

Casaús Arzú, Marta Elena. Guatemala: Linaje y racismo. (Guatemala: Lineage and Racism)

Guatemala: F&G Editores. 2007. 339p.
ISBN 978-99922-61-53-8. pap. $60.95. SOC SCI

Now in its third edition, this is a revised, expanded, and updated version of an important study on the development of Guatemala’s elite. First published in Costa Rica in 1992 and available for the first time from a major Guatemalan publisher, this study is representative of a new generation of Central American historians who creatively use social science methodology to explain Central American historical evolution. In this superb volume, Casaús studies the genealogy and history of eight of the most prominent families in Guatemalan history. She demonstrates that they were not only important in the 19th century but were able to flourish through the 20th century by diversifying economically, developing important alliances with similar dominant families (primarily with strategic marriages), and maintaining connections and affiliations with all major political factions. Casaús shows that a fundamental aspect of the thinking and activities of these families was a racism that was used to justify suppression of the country’s indigenous majority population. Well written and easy to read, this work makes for an important understanding of the Guatemalan political and economic elite, thus providing the background needed to comprehend present-day Guatemalan political and economic events. Highly recommended for large collections.—Mark L. Grover, Brigham Young Univ., Provo, Utah.

elPeriódico. Pág. 15. Guatemala, martes 13 de noviembre de 2007.

Los libros más vendidos durante octubre de 2007

SOPHOS

"The Art of Political Murder: Who Killed The Bishop?", Francisco Goldman, Grove Press.

"Guatemala: linaje y racismo": Marta Elena Casaús Arzú, F&G Editores.

"Fábula del tiburón y las sardinas", Juan José Arévalo, Flacso.

"La rebelión de Atlas", Ayn Rand, Grito Sagrado.

"Guatemala, La historia silenciada (1944-1989)", Carlos Sabino, FCE.

"Diccionario de guatemaltequismos", Sergio Morales Pellecer, Artemis Edinter.

"Guatemala: Causas y orígenes del enfrentamiento", Varios, F&G Editores.

"El leproso", Méndez Vides, Alfaguara.

"El principito", Antoine De Saint-Exupéry, Piedrasanta.

"La puta de Babilonia", Fernando Vallejo, Planeta.

elPeriódico. Pág. 15. Guatemala, miércoles 9 de enero de 2008.

Los libros más vendidos durante diciembre de 2007

SOPHOS

"El leproso irreverente", Raúl De la Horra, Cultura.

"La Lluvia", Méndez Vides, Norma.

"Guatemala, La historia silenciada (1944-1989)", Carlos Sabino, FCE.

"El secreto", Rhonda Byrne, Atria Books.

"Guatemala: linaje y racismo": Marta Elena Casaús Arzú, F&G Editores.

"Hombre adentro", Francisco Pérez De Antón, Alfaguara.

"The Art of Political Murder", Francisco Goldman, Grove Press.

"Amando a Pablo, odiando a Escobar", Virginia Vallejo, Grijalbo.

"La tragedia de la Embajada de España en Guatemala, 31 de enero de 1980", Jorge Luján Muñoz, Magna Terra Editores.

"Las violencias en Guatemala", Raúl Zepeda López, FLACSO.

elPeriódico / Buena Vida: Cultura. Pág. 52. Guatemala, miércoles 16 de enero de 2008.

Entre los mejores

El libro Guatemala: linaje y racismo, de la escritora guatemalteca Marta Elena Casaús, publicado por F&G Editores fue elegido entre los mejores del 2007 por la revista Críticas (and English speaker´s guide to the latest Spanish language titles). El artículo puede encontrarse en: www.criticasmagazine.com.

Prensa Libre / Actualidad. Pág. 10. Guatemala, martes 29 de enero de 2008.

Guatemaltecos prefieren libros de autoayuda

Por: Claudia Méndez Villaseñor

Situaciones conflictivas o traumáticas que ocurren todos los días inclinaron la balanza de los gustos de lectura de los guatemaltecos, quienes hoy consideran más atractivo adquirir un libro de autoayuda o de historia contemporánea del país que una obra clásica de literatura universal.

El segmento de obras religiosas también ha crecido en los últimos cinco años.

Las listas de obras más vendidas en las librerías Sophos y Artemis-Edínter en el 2007 incluyeron títulos como Ser como el río que fluye, de Paulo Coelho; El secreto, de Rhonda Byrne; ¿Quién se ha llevado mi queso?, de Spencer Johnson; Jesús de Nazareth, del papa Benedicto XVI (Joseph Ratzinger), y La calle donde tú vives, de Héctor Gaytán.

Todos, a excepción del último libro, fueron concebidos con el objetivo de brindar al lector consejos prácticos y ayuda espiritual en situaciones extremas o traumáticas.

La obra de Gaytán y la de Ratzinger se ubican en los segmentos de relatos y temas religiosos, que gozan de gran demanda.

Motivación

“Hay dos tipos de libros que suelen atraer a los lectores; los primeros son los de autoayuda, de autosuperación, de cómo resolver problemas emocionales, con los hijos, o cómo superar un divorcio. No son psicológicos, sino que muchos abordan los temas entre la psicología y la magia o desde la psicología y la religión”, explicó Raúl Figueroa, presidente de la Gremial de Editores de Guatemala y fundador de F&G Editores. “Aunque no tenemos datos, el libro religioso se vende muchísimo”, agregó.

Philippe Hunziker, de librería Sophos, opinó que Dios es el autor más leído en Guatemala.

El libro de autoayuda es de creación reciente, dijo Figueroa. “Para mí, es un problema grave que se lea este tipo de literatura, porque no le da soluciones a la gente. Se va por las ramas. Eso baja los niveles del intelecto al sentido común”, añadió.

Ventas crecientes

Según Hunziker, el interés por los libros de historia contemporánea no es casualidad, ya que esta lectura fue considerada subversiva durante mucho tiempo en Guatemala.

Aunque no hay estadísticas sobre cuántas personas leen en el país, el crecimiento de las importaciones de libros revelan un interés importante por la lectura, agregó.

Afirmó que, de Q30 millones en el 2001, la importación de libros subió a casi Q50 millones en el 2006, y la producción de nuevos títulos, de 379 en el 2003, a mil 216 en el 2007.

Prensa Libre / PERSISTENCIA. Pág. 16. Guatemala, jueves 7 de febrero de 2008.

El libro de Casaús abarca toda la sociedad latinoamericana regida aún por élites familiares.

 

Linaje y racismo
Margarita Carrera

El libro de Marta Elena Casaús Arzú, excelentemente editado por F&G editores: Guatemala: linaje y racismo, se encuentra dentro de los mejores libros del año 2007, según la revista de Nueva York Críticas (“An English speaker’s guide to the latest Spanish language titles”). Quien hace la reseña es Aída Bardales, dentro del tema The Best Adult Books and Videos of 2007: se trata de una lista de 17 libros en español considerados de mayor difusión por su contenido y calidad. Según orden alfabético, la obra de Marta Elena Casaús Arzú ocupa el número 11. De acuerdo con la traducción que hago, Aída Bardales escribe: “Ahora en su tercera edición, corregida y aumentada, esta nueva versión proporciona un importante estudio de la élite de Guatemala”.

En este soberbio volumen (339 páginas), Casaús estudia genealogía e historia de las ocho más prominentes familias en la historia de Guatemala. Señala que un aspecto fundamental del pensamiento y actividades de estas familias es su racismo, usado como justificación para la marginación de los indígenas del país, mayoría dentro de la población guatemalteca. Bien escrita y fácil de leer, este trabajo nos provee el sustrato necesario para comprender los eventos políticos y económicos de la Guatemala de hoy en día.

Marta Elena Casaús Arzú es doctora en Ciencias Políticas y Sociología, profesora titular de Historia de América en la Universidad Autónoma de Madrid, investigadora principal en múltiples proyectos relacionados con el desarrollo intelectual centroamericano y autora de varios sobresalientes libros sobre el racismo. El hecho de que Guatemala: linaje y racismo haya sido seleccionada entre las mejores obras publicadas en América Latina nos hace reflexionar sobre su trascendencia y la necesidad de los historiadores guatemaltecos de consultarla y tenerla presente a la hora de enfocar el desarrollo de nuestro país desde los inicios de la conquista. Porque, desde la era colonial, la oligarquía se ha adueñado del poder y ha gobernado Guatemala bajo el signo del racismo: “El prejuicio étnico-racial es a la vez un prejuicio de clase que, poco a poco, a lo largo de la historia, va configurando el imaginario racista del guatemalteco”. Si bien el racismo se ha venido estudiando desde diversas perspectivas, hasta ahora se hace desde el punto de vista de la familia como agente socializador fundamental, encargado de divulgar e imponer semejante ideología, en donde no sólo el varón ha intervenido, sino también la mujer: “El papel de las mujeres en este proceso ha sido determinante y poco estudiado”; un reto para que las especialistas en Ciencias Políticas y Sociales indaguen y escriban sobre este apasionante tema. La importancia que tienen las redes familiares se produce principalmente allí donde existe una población indígena, en donde el factor socio-racial ocupa un puesto preeminente dentro de la estructura política, especialmente en sociedades agroexportadoras en las que el patrón continúa ocupando un lugar principalísimo en el conjunto de la sociedad. Las alianzas matrimoniales siguen siendo relevantes, pues propician el crecimiento y reproducción de los linajes a través de casamientos por conveniencia.

Quienes hemos sufrido en carne propia semejante forma de pensar estamos convencidos de la estrechez de criterio que se da dentro de las familias élite, que actúan como los nazis frente a los judíos, algo que se demostró durante la guerra sucia que duró más de 36 años y en donde se dieron los más horrendos crímenes, sobre todo de parte del Ejército, al servicio de las élites guatemaltecas y del gobierno de Washington.

La única forma de liberarse de tal contagio fascista es acercarse a la cultura humanística que, actualmente, parece estar desapareciendo dentro de las diversas universidades privadas de Guatemala. Pero el libro de Casaús abarca, además, la estructura social latinoamericana; de ahí su importancia y el merecido reconocimiento que ha tenido a nivel internacional.

elPeriódico. Pág. 15. Guatemala, jueves 7 de febrero de 2008.

Los libros más vendidos durante enero de 2008

ARTEMIS EDINTER

"El alquimista", Michael Scott, Editorial Roca.

"La montaña infinita", F. González, Artemis Edinter.

"El ataque contra la razón", Al Gore, Grijalbo.

"Memorias de un pasado cercano", Mario Guerra Roldán, Artemis Edinter.

"Guatemala: linaje y racismo": Marta Casaús, F&G Editores.

"El secreto", Rhonda Byrne, Urano.

"Pequeño Larousse 2008", Larousse, Larousse.

"Jesús de Nazaret", Joseph Ratzinger, Planeta.

"La ladrona de libros", Markus Zusak, Lumen.

"Hombre adentro", Francisco Pérez de Antón, Alfaguara.

elPeriódico / Opinión. Pág. 14. Guatemala, viernes 15 de febrero de 2008.

 

Implicará la destrucción de las ideas que sustentan el régimen

Familias
Por: Carol Zardetto

En su obra denominada Guatemala: linaje y racismo, Marta Elena Casaús Arzú, llega a conclusiones de enorme envergadura para explicar la convulsa historia de nuestro país.

Básicamente, el libro desarrolla dos premisas. La primera es que la estructura de poder en Guatemala fue articulada por una red de familias mediante los matrimonios de conveniencia y su alta incidencia en la economía y la política. Estas familias han monopolizado hasta hoy el poder mediante redes de influencia. La otra es que un elemento fundamental de esta estructura es su concepción elitista, racista y excluyente.

Ambas premisas derivan en otra de las conclusiones: las acciones del Ejército en el conflicto armado interno respondieron a la defensa de los intereses de este grupo social.

Respecto de esta obra, me asaltan comentarios y cuestionamientos. Si nos atenemos a la Constitución Política, Guatemala es una república democrática, por tanto, articulada alrededor de conceptos básicos tales como: la existencia de ciudadanos libres e iguales frente a la Ley y la obligación del Estado de responder a los intereses de la mayoría. A pesar de las implicaciones de este discurso, quienes habitamos este país experimentamos otra realidad: el ciudadano no existe y la responsabilidad de responder al bien común por parte del Estado es tan débil que puede hacer caso omiso, sin consecuencias. Entonces, nuestro drama es existir bajo una apariencia. El régimen democrático que algunos defendemos, se asfixia, pues subyace una estructura de poder real incompatible con sus preceptos fundamentales.

El pecado original de estas familias “fundacionales” fue establecer un país bajo la “lógica” de un régimen basado en privilegios. Esta lógica se ha extendido en el decurso de la Historia. Así, otros grupos (sectores con influencia política o militar por ejemplo), han abusado de igual manera. El hecho de que prevalezcan los privilegios por encima de la igualdad ciudadana y el bien común, ha destruido la confiabilidad en la ley y ha debilitado las instituciones, haciendo de cada individuo un descreído del sistema.

En cuanto a la “utilización” del Ejército y los poderes del Estado por las redes familiares oligárquicas (y otros sectores poderosos) para sus fines, ha incidido en la perversión de muchos de sus miembros quienes hoy reclaman tajadas de poder desde las filas de oscuros aparatos clandestinos. Sin duda el alto nivel de impunidad que nos agobia es parte del escenario que esta realidad genera.

Construir al ciudadano en el imaginario guatemalteco implicará la necesaria destrucción de las ideas que sustentan al régimen “real” que hoy vivimos. Especialmente deberán desparecer los rancios conceptos de linaje y racismo, pues una estructura mental y material que impide la movilidad social de la mayoría y la justicia, solo puede generar violencia.

BBC Mundo.com. Viernes 4 de abril de 2008.

 

“Los países colonizados somos Estados racistas, el Estado ha utilizado el racismo para controlar a la población y para generar un sistema de dominación”

"Los países colonizados somos Estados racistas".
BBC Estudio Abierto

La historiadora guatemalteca Marta Casaús ha dedicado décadas a diseccionar un mal profundo y polémico que impide el desarrollo de América Latina.

"Racismo no es sólo discriminación, sino un sistema de explotación", agrega Casaús, quien con libros como "Guatemala: linaje y racismo" se ha animado a mirar de frente el impacto del racismo y de las redes familiares en las estructuras de poder.

Se trata de un tema que hiere sensibilidades, hasta tal punto que, como ella misma cuenta, "cuando apareció mi libro, mi familia me dejó de hablar". ¿Como combatir el racismo?

¿Como cambiar actitudes, incluso, en los niños? La investigadora habla del caso de su propia hija, a quien ayudó con "inmersión en una aldea en Guatemala" y contacto con comunidades negras en EE.UU.

La historiadora reside en España donde es catedrática de Historia de América en la Universidad Autónoma de Madrid.

Marta Casaús respondió a los lectores en BBC Estudio Abierto.

Soy peruana y me gustaría saber si conoce la realidad de mi país. El anterior presidente de mi país fue el Dr. Alejandro Toledo, quien es lo que llamamos en el Perú un "cholo"; por si acaso yo también lo soy, una "chola". Los "blanquitos" del país le hicieron la vida imposible y no le perdonaron una, aún ahora cuando hablan de él lo tratan de manera muy despectiva. ¿Qué pasa con los peruanos? ¿Por qué unos nos creemos mejor que otros, por el color de la piel? Marisa Garnique, Lima, Perú

Yo creo que el racismo es un elemento histórico estructural. No hay que olvidar que España de alguna manera tenía ese pensamiento racial, en la medida en que tenías que tener limpieza de sangre, pureza de sangre para obtener una encomienda o ser noble. Esto es lo que yo llamo la "pigmentocracia": España va a catalogar o a clasificar a la estructura social en función de ser más o menos blanco, mitad indígena y blanco, etcétera. Van a tener 45 castas en función de la pureza de sangre.

Eso va a marcar América Latina. Y en la actualidad, realmente, hay una fuerte humillación. No es lo mismo ser pobre, que ser pobre e indio. Cuando ocurrió el terremoto, le dije a una señora de la clase dominante, "qué horror, murieron 30.000 personas" y me respondió, "pero si no murió nadie". Yo le dije "pero cómo, 30.000 personas" y me dice "ah, sí, pero esos eran indios". El indio como cosa, eso es lo que va a llevar al genocidio, a la cosificación y a la deshumanización del indígena.

¿Por qué algunos intelectuales guatemaltecos progresistas siguen sin admitir el genocidio de los indígenas? Teresa García, Madrid, España

Por una cosa muy sencilla, porque la izquierda latinoamericana, quitando a Mariategui, invisibilizó el racismo, y en ese sentido se creía que era un problema de campesinos, o de clase. Pero en el fondo, el genocidio no es más que la máxima expresión del racismo.

La izquierda nunca ha aceptado que hay racismo en América Latina y desde esa perspectiva niegan el genocidio, dicen que fue un problema de clases, una guerra civil. No. Fue un etnocidio, el 70% de la población asesinada era indígena, eran mujeres mayas. Esto no se puede encubrir, y creo que la izquierda tiende a hacer trampas al respecto en toda América Latina en general.

Me interesa que profundice en la relación entre un estado racista y la probabilidad de que ejecute políticas de genocidio, con un enfoque guatemalteco. Estoy apoyando un proyecto fílmico que tratará el genocidio. Eileen V. Rivera, Guatemala, Guatemala

Los países colonizados somos Estados racistas, es decir, el Estado ha utilizado el racismo para diferenciar, para controlar a la población y para generar un sistema de dominación.

Porque no olvidemos que el racismo no es sólo discriminación, es la generación de unas diferencias o desigualdades que generan discriminaciones, explotación, que generan un sistema de explotación. Desde esa perspectiva, yo creo que el racismo es el elemento estructural que va a conformar todas las relaciones en América Latina y eso es lo que va a provocar también pobreza, desigualdad, etcétera.

Tengo la impresión de que en Guatemala pocos pueden explicar la pureza de su origen (español, alemán, francés, etc.). En consecuencia, nos encontramos con una sociedad que se niega a aceptar que, lejos de ladinos o indígenas, somos una sociedad mestiza por todos lados. ¿Es así? Rudy Tun, Guatemala, Guatemala

Todos los latinoamericanos somos mestizos, mestizos cholos como se les dice en Perú, mestizos ladinos, como decimos en Guatemala. El problema es haber negado el mestizaje y habernos creído blancos. En Guatemala, el mestizaje no se reconoce, pero todos somos mestizos. La clase dominante se considera o blanca, o criolla, o europea, y el resto de la población se considera o indígena o maya. Y un grupo, el grupo mestizo, se considera una cosa rara que es el ser ladino, pero ladino es un mestizaje cultural.

Lo que no hemos aceptado nosotros, como los mexicanos, es la ideología del mestizaje como un elemento de construcción de la identidad nacional, y ese es nuestro fallo. La gran diferencia entre México y Guatemala es que México se considera mestizo y nosotros nos consideramos o blancos, o ladinos, o mayas, indígenas, con lo cual no logramos construir una identidad nacional.

Pero en el caso de México, aún cuando se reconozca el mestizaje, el racismo es un problema. Por ejemplo, en Chiapas algunas personas, que a ojos de afuera no son tan diferentes físicamente de los grupos indígenas, hacen sin embargo la distinción.

Lo que pasa es que México tuvo la virtud, con la Revolución Mexicana o antes, con los ideólogos de la prerrevolución, de construir el mestizaje como el elemento aglutinador de la identidad mexicana. Ser mestizo es ser mexicano. Desde esa perspectiva, se creyó que era mestizo, hasta que aparecieron los indios de Chiapas y se dieron cuenta que ellos no se consideraban mestizos, sino que se consideraban indígenas, y de alguna manera se les cayó su ideología mestiza.

Pero ello les ayudó a construir un gran país, como es México. Sin embargo, nosotros desde 1930 tuvimos un proyecto eugenésico de nación, queríamos "mejorar la raza", blanquear la nación, y construir una nación de blancos, a pesar de que el 70% de nuestra población era indígena. Ese ir en contra, -como Argentina que se construyó sobre lo blanco-, fue lo que nos impidió la construcción de identidad nacional y lo que nos hizo ser un Estado racista.

Somos un Estado racista que en momentos determinados aplicamos el racismo de Estado como única vía para "controlar" a la población o para seguir manteniendo el poder de una élite blanca o que se considera blanca.

¿Cuál es su experiencia "desde dentro" como parte de una de las familias de poder en Guatemala? Alejandra, Washington , United States

Sin duda alguna, yo pertenezco a una de esas redes familiares de larga duración, a la familia Arzú, y yo creo que la originalidad de esta investigación y su poder de movilización fue porque otra persona que no fuera de la oligarquía no habría podido pasar esta encuesta. Sin lugar a dudas, no se la habrían respondido. No habrían podido acceder a la clase dominante.

Yo no hice una investigación así como denuncia, yo misma me sorprendí del nivel de racismo fenotípico y genetista de mis familiares. Yo pensé que iba a ser un racismo más "light", algo así como "los discriminamos porque son diferentes", pero no pensé que iban a decir "porque son una raza inferior".

Lo que me sorprendió cuando yo pasé esta encuesta a 100 miembros de la élite de poder es que un porcentaje muy alto, un 15%, era partidario de la mejora de la raza.

¿Qué se puede hacer para comenzar a cambiar?

Cuando apareció mi libro, mi familia me dejó de hablar, yo llegaba a Guatemala y es que no me miraban. Y sin embargo, había sido muy leído en la población maya, los pueblos indígenas fueron los que bebieron el libro. Entonces empezamos a hacer diálogos interculturales entre mayas, indígenas, ladinos y algunos de la élite que querían dialogar, y a partir de ahí establecimos bases sólidas para generar una política pública contra el racismo y la discriminación.

Si me preguntan qué hay que hacer, creo que hay que desactivar los mecanismos de prejuicios, estereotipos, de desigualdades que están fundamentadas en el racismo. En ese sentido, yo creo que la política pública que se aprobó el año pasado en Guatemala puede ser el principio de la desactivación de esos prejuicios.

¿Podrías darnos algunos ejemplos de qué se puede hacer en concreto ?

En principio, crear espacios interculturales donde debatan indígenas y no indígenas, y se den cuenta los mestizos o ladinos, que los indígenas tienen muchísimo que aportar al proyecto de una nación nueva. En segundo lugar, penalizar la discriminación, si se discrimina a una persona por entrar con su traje o por hablar su idioma. Quien discrimina tiene que se penalizado por ley, ir a la cárcel o pagar un multa.

También pagar igualdad de salario, se le pagan menos a las mujeres y menos a los indígenas. Discriminar nos cuesta en nuestra país 3.000 millones de quetzales (US$400 millones), está medido, cada año perdemos esa cantidad de dinero por discriminar al indígena y no pagarle lo que se les debe pagar.

Entonces, en la medida que tomemos conciencia de que es un programa nacional, que el racismo nos divide, que nos impide comunicarnos, que nos impide crear una construcción de un proyecto nacional, y que además nos impide crecer económicamente, tomaremos las medidas para paliar ese tema.

Hablemos de la educación y los niños. En muchos países se usan incluso términos en diminutivo para referirse a personas de otros grupos.

Empezar con una educación intercultural, de reconocimiento del otro, de valoración de la cultura del otro, y empezar a establecer mecanismo de desactivación del prejuicio. Por ejemplo, es normal decir en países de América Latina, "no seas indio" como diciendo "no seas tonto", o indito, o "ishto" como forma de minusvalorar al otro ("ishto" viene del vocablo "ixto", palabra de etimología nahuatl o quiche, que quiere decir indio pero en tono despectivo).

Pero nosotros lo que hemos hecho en la política pública es hacer todo un sistema para niños con juegos interactivos, precisamente para tratar de desactivar los prejuicios desde la más tierna infancia.

En cuanto a políticas públicas, realizamos una publicación de seis volúmenes para diagnosticar el racismo en Guatemala, con el fin de llevar a cabo una política contra el racismo y la discriminación, que se aprobó en octubre de 2006.

De esos volúmenes se hicieron mas de 150.000 discos para las escuelas para explicar el tema del racismo, pero además se hizo una versión para niños, una serie de fichas con un CD interactivo para estudiantes de secundaria.

Por la encuesta nuestra, nos dimos cuenta que donde se dispersaba la ideología era en la familia, y eran las madres las que de alguna forma alimentaban este racismo en sus hijos, y posteriormente la escuela y la universidad. La universidad latinoamericana es profundamente racista.

Hay que abordar el sistema educativo en su conjunto, todos los libros de texto, y sobre todo, dar mayor acceso a los indígenas a la universidad.

Volviendo al caso de los niños, ¿cómo se hace para enseñarle a un niño, si su propio padre o madre dicen "indito", que eso está mal?

No sé como hacerlo, pero en mi casa lo he hecho de maravillas. Realmente demostrando que la diversidad étnica, de género, es un elemento siempre enriquecedor para la formación y la comprensión de un mundo global.

Mi hija se crió en España, mucho más clasista y con ciertos prejuicios racistas muy fuertes, y porque nosotros vivimos en una zona muy residencial, me planteé seriamente empezar a llevarla a Estados Unidos, que fuera a campamentos con población de color, porque le tenía pánico a los negros.

Y en Guatemala, como nosotros trabajamos en aldeas, tenemos una maestría en indígenas y mujeres, la envíe allá y al coordinador le dije "un baño de inmersión en la aldea, y ahí se queda", y cuanto más pasen unos años, se va todo el verano a vivir y a trabajar con comunidades indígenas, como se han ido las otras.

Es importante el contacto, lo que llama una hija mía la psicología del contacto, interactuar permanentemente y general un proyecto intercultural, donde se valore y se reconozca la cultura del otro como un bien positivo, no como un bien negativo. Y eso cambia las mentalidades.

¿Cree que pueda surgir un racismo de las clases indígenas contra los mestizos o blancoides en Bolivia, porque todos los problemas que están surgiendo son por un racismo contrario de la clase indígena? Dr. Oscar E. Villanueva L., Cochabamba, Bolivia

Yo creo que el hecho de que haya llegado un indígena al poder como Evo Morales es una cosa sorprendente y notoria y yo entiendo, como cuando Rigoberto Menchú se lanza a la presidencia de Guatemala, que eso genere temor en los ladinos o en los mestizos, porque hay una sensación de "si los hemos oprimido, dominado toda la vida, cuando lleguen al poder nos van a machacar".

Pero por mi larga experiencia de acompañamiento de los procesos indígenas, los indígenas no tienen ese planteamiento vengativo. Pero sí es verdad que para el mestizo hay una situación de desconfianza y temor del racismo a la inversa "cuando los indígenas lleguen al poder, nos van a excluir a nosotros".

Yo creo que lo que hay que buscar son puentes, relacionamientos, pactos sociales interétnicos, interclases, interculturales, que nos permita construir un proyecto de identidad nacional.

No hay que tenerle miedo a la llegada de los indígenas al poder, lo que hay que tenerle miedo es a enfrentarse brutalmente como un sector de la sociedad boliviana se está enfrentado contra los indígenas porque eso sí crea radicalismos y etnicismos, tanto de los blancos como de los indígenas. Lo que hay que buscar es puentes de entendimiento.

Soy educador, trabajo con muchachos de 16 años aproximadamente. Aquí en Latinoamérica siempre había habido una discriminación de tipo racial, pero eso ha ido desapareciendo. Pareciera que está siendo sustituida por una discriminación de tipo económica, lo que antes se le hacía al negro ahora se le hace al pobre. ¿Cómo atacar la discriminación socio-económica que es tan despectiva? Humberto González, Valencia, Venezuela

La discriminación en general puede afectar a la etnia, clase, al género, una discriminación etaria, por ser viejo o joven. La discriminación puede afectar a todos los ámbitos. Ahora, el racismo sí está vinculado a la diferenciación y a la valorización negativa de una raza o de un grupo étnico determinado.

Yo creo que en América Latina el mapa étnico y el mapa de la pobreza están muy unidos, donde hay mayor pobreza es donde está el grupo indígena o el grupo negro o grupos étnico raciales. La discriminación de clase también es muy fuerte y normalmente los más pobres son los de clases más bajas pero que a su vez son mujeres y a su vez son indígenas, se produce una articulación de tres discriminaciones diferentes.

Yo creería que en la medida en que cualquiera de ellas vaya saliendo adelante, ya sea la lucha contra la desigualdad, de que habla Amartya Sen, o la lucha contra la discriminación de género o étnica, todas ellas va a contribuir notablemente a primero generar un ambiente de mucha más confianza en las instituciones y por otra parte salir de la pobreza que es el principal problema de América Latina, sin lugar a dudas.

Los españoles nunca se han considerado a sí mismos racistas. ¿Usted qué cree? Tina, Madrid, España

Yo vivo en España y soy mitad española y mitad guatemalteca, pero yo he de decir que los españoles son profundamente racistas, y en ese sentido esa consideración de que no se es racista se dice porque nunca tuvieron grupos de inmigrantes viviendo con ellos.

En cuanto vino la inmigración árabe o marroquí o de América Latina, los patrones de racismo son brutales. La forma como le pegaban a una chica en el metro o como destrozaron a un chico guineano que lo dejaron en una silla de ruedas, prueba que el racismo existe y es un elemento importante en la sociedad.

Y además históricamente fue así, nosotros los latinoamericanos, de alguna manera heredamos de España ese planteamiento de que había que "mejorar la raza", en ese momento teníamos que tener pureza o limpieza de sangre y se establece una sociedad de castas basada en la pigmentocracia, en el color de la piel. Se dice "es que los españoles llegaron ahí y se mestizaron", bueno, porque no fueron con mujeres y durante 30 años no tuvieron otra alternativa. Pienso que cualquier sociedad con grupos fuertes de inmigrantes es una sociedad que tiende a hacer ghettos. Entonces, ¿qué está haciendo España, con una enorme inversión? Hacer proyectos interculturales para hacer desactivar, los prejuicios y estereotipos contra el inmigrante.

¿Cómo le gustaría a Marta Casaús ser recordada?

Me encantaría ser recordada como una persona que luchó contra el racismo y consiguió evitar otro nuevo genocidio y generar un proyecto de nación en toda América Latina, en donde etnia, género y clase, fueran acompañados de un proyecto fuerte de identidad nacional.

FUENTE: BBC Mundo.com

Nuestro Diario / Edición Dominical. Págs. 8-9. Guatemala, domingo 6 de abril de 2008.

 

“El guatemalteco, por lo general, es una persona muy trabajadora. Somos tranquilos y por eso es positivo”

Marta Elena Casaús Arzu
Socióloga guatemalteca residente en España

Por Gonzalo Maldonado / corresponsal en España

Madrid. En su oficina de Madrid, ciudad donde vive desde muy pequeña, Marta Casaús habló con Nuestro Diario en torno a su visión sobre Guatemala. Es una reconocida socióloga, investigadora y catedrática de la Historia de América en la Universidad Autónoma de Madrid.

Ha escrito innumerables obras sobre nuestro país y, para demostrar su interés por la tierra que la vio nacer, también desarrolla varios proyectos de beneficio para guatemaltecos.

¿Cómo y cuándo decide vivir en España?
— Mi madre se casó en terceras nupcias con un español , y por esa razón fue el viaje. Yo tenía 12 años.

¿Cómo era la España que encontró?
— Me encontré una España fascista, donde todo estaba prohibido, tanto en lo personal como lo sexual. Pero tuve la fortuna de vivir el proceso de transición.

Aunque es difícil de comparar, ¿qué ejemplo de lo que ha vivido en España puede extraer y aplicar en Guatemala?
— Son realidades distintas que parten de procesos políticos e históricos muy diferentes, y de modelos de Estado diametralmente opuestos. Los elementos esenciales de los dos países es que partían de una guerra y una represión muy fuertes. La Transición en Guatemala la hacen las élites y los movimientos sociales. Fue una transición relativamente pactada en los Acuerdos de Paz.

Por otra parte, también fue una transición pactada a nivel regional con los presidentes centroamericanos, pero sobre todo fue un intento de llegar a un nuevo modelo de Estado y de nación, y de transitar a un proceso democrático sin precedentes. En España se consiguió, en Guatemala no. En España, la violencia y la represión desaparecieron y en Guatemala se recrudecieron.

¿Existen todavía los movimientos sociales en Guatemala? ¿Es el guatemalteco una persona resignada?
— Yo creo que no, pero la represión fue tan brutal que es una sociedad con miedo. No es para resignarse, pero las religiones, la católica y sobre todo la evangélica, ha introducido ese pensamiento cristiano que sólo Dios puede remediar las cosas. Realmente es una sociedad muy combativa, pero la represión ha sido la más fuerte de Latinoamérica.

Se dice que Augusto Pinochet mató en Chile a 3 mil personas y otras miles desaparecieron. En Guatemala murieron más de 200 mil personas, pero el mundo desconoce este hecho.
— Pinochet fue un arcángel comparado con cualquier militar de tercera de Guatemala. Siempre se conoce más a un dictador, que a un régimen sistematizado donde el aparato represivo está controlado por militares, policías y grupos paramilitares que asesina sistemáticamente a la población. Entonces te olvidas del líder.

¿Es Guatemala un país racista?
— Es un país profundamente racista. El racismo está inmerso en la mente de las personas. Pero al margen de un racismo histórico estructural, se debe señalar que el Estado es racista. Esto en la medida que discrimina a unos frente a otros, en salud, educación o trabajo.

¿Eso es un problema de clasismo, de élites?
— Es un problema complejo, histórico. La élite guatemalteca es la más racista y discriminatoria de toda Latinoamérica. Lo que pasa es que la naturalización del racismo es que tal magnitud que ellos no se perciben como racistas. Incluso el discriminado por era consciente de lo mucho que se discriminaba.

Y España ¿es un país racista?
— Sí, La experiencias en general de ciudadanos guatemaltecos, tanto los que se han podido situar como los que han venido a trabajar en el campo o en fábricas, han sido bastante exitosas. El guatemalteco en general es una persona muy trabajadora, u no son broncas. Somos tranquilos y eso es positivo. No hay ningún logar en el mundo donde las colonias guatemaltecas hayan generado problemas y no progresaran.

¿Le costó adaptarse a España?
— No, nada. A las personas que procedemos de una élite y que de alguna manera tenemos solucionado el problema económico, generalmente no nos puede ir mal, porque tenemos una situación de privilegio que nos da ventaja respecto a los demás. También en la universidad, me ubiqué en la Facultad de Ciencias Políticas, que en ese momento estaba en la punta de la transición, siendo uno de los momentos más bonitos. En España sales y no te preguntas si volverás a casa. En Guatemala sales y dices: “Ojalá que pueda volver vivo”. Esa sensación de temor por tu vida desaparece en Europa.

¿Cómo se puede combatir esa violencia de tipo estructural?
— Hay un elemento esencial, de que mientras no progresemos no hay nada qué hacer. Hablo de que hay una justicia que realmente se ejecute frente a las personas que violan sistemáticamente los derechos humanos.

Además de impartir clases, ¿tiene otros proyectos en España?
— Creamos una ONG y trabajamos en todo el proceso de la reconstrucción en Guatemala. Tenemos una maestría para indígenas y mujeres. Hemos formado a más de 300 líderes indígenas. La mitad de mis proyectos, tanto de formación, como de cooperación e investigación, están en Guatemala. Estamos formando redes y capital social.

¿Qué espera del nuevo presidente?
— Yo espero que no vaya para atrás. Hay que ver si su discurso político viene acompañado de prácticas políticas. Hay que darle un voto de confianza y ver qué sucede. Hay que conseguir que los escasos logros alcanzados tras la firma de la paz no vayan para atrás. Un logro importante fue una transición democrática organizada, donde se entrenó ministerio por ministerio. No hubo un robo descarado con Berger. Esperemos que exista una consolidación democrática y avances en vencer a la pobreza, la desigualdad, el racismo y la violencia. El cáncer del país es la pobreza, el racismo y la violencia. Si eso no lo atajan, no habrá nada que hacer.

Prensa Libre / PERSISTENCIA. Guatemala, jueves 17 de abril de 2008.

Casaús "se pregunta si un Estado racista tiene más probabilidades de desarrollar políticas de genocidio o etnocidios...".

 

Casaús en BBC Mundo
Margarita Carrera

El jueves 27 de marzo se transmitió en BBC Mundo, Estudio abierto, un reportaje sobre Marta Casaús, que conlleva su fotografía y se titula: “Pregúntele a… Marta Casaús, escritora”. Como se trata de una investigadora y escritora guatemalteca, catedrática de la Universidad Autónoma de Madrid, que ha destacado fuera de nuestras fronteras, me parece de gran importancia dar a conocer lo que se escribe sobre ella. La copia literal dice: “Es probable que pocos conozcan la sociedad guatemalteca como Marta Elena Casaús Arzú. Esta investigadora se ha dedicado a diseccionar Guatemala, a fin de ofrecer soluciones a los problemas sociales, políticos y culturales que durante años han dividido su país.

“Con trabajos como La metamorfosis del racismo en Guatemala, Diagnóstico sobre el racismo o Guatemala: linaje y racismo, entre muchos otros, Casaús ha hecho un aporte considerado por los especialistas como ‘importantísimo’ a la investigación de las formaciones de los grupos dominantes a lo largo de la historia no solo de su país sino del mundo en desarrollo. Aun cuando su principal campo de estudio ha sido la sociedad guatemalteca, con cicatrices abiertas de los 36 años de guerra civil, Casaús también ha escrito sobre los cambios sociológicos en América Latina y el fenómeno de la inmigración en España, país en el que reside.

“Esta catedrática de Historia de América ha tomado las desigualdades y prejuicios como bandera de una lucha en que la investigación es el campo de enfrentamientos y la comprensión de quiénes somos y por qué somos es el camino a la victoria: disminuir —quizás erradicar— las diferencias sociales.

“En sus estudios, Casaús analiza qué papel juega el racismo en la estructura de poder y en los estados latinoamericanos. Se pregunta, también, si un Estado racista tiene más probabilidades de desarrollar políticas de genocidio o etnocidios como en el caso de Kosovo o Ruanda.

“También estudia la pervivencia de las redes familiares en los negocios y en la vida política latinoamericana, y por qué estas familias han logrado sobrevivir a los avatares de la historia y de los cambios.

“Su invaluable conocimiento de la historia hispanoamericana —en general— y guatemalteca —en particular— es la carta de presentación de esta pedagoga dispuesta a responder a las inquietudes de los lectores en BBC, Estudio abierto”.

A continuación, la BBC abre un espacio que dice: “Entreviste a Marta Casaús. Envíe sus preguntas usando el siguiente formulario: Nombre, correo electrónico, ciudad, país, teléfono (opcional), mensaje (máx. 50 palabras). Diana Zileri. Producer. BBC Spanish Americas Section 0044 (0) 207 557 3608”.

Es motivo de orgullo para Guatemala que una compatriota nuestra tenga un papel tan destacado en España y el mundo. Ya en Críticas Magazine, de Nueva York, apareció en “The Best Books and Videos of 2007 (12/15/2007)”, como una de las mejores obras: Guatemala: linaje y racismo (Guatemala: Lineage and Racism) Casaús Arzú, Marta Elena. Guatemala: F&G Editores. 2007. 339 páginas… “New in its third edition, this is a revised, expanded, and updated version of an important study on the development of Guatemala’s elite. In this superb volume, Casaús studies the genealogy and history of eight of the most prominent families in Guatemalan history and shows that a fundamental aspect of the thinking and activities of these families was a racism that was used to justify suppression of the country’s indigenous majority population. Well written and easy to read, this work provides the background needed to comprehend present-day Guatemalan political and economic events” (Críticas, 10/15/07; starred). La obra, comentada por mí hace meses, continúa su ascenso en el campo de los estudios sobre América Latina. El nombre de Marta Elena Casaús es ya reconocido a escala mundial.

elPeriódico.. Pág. 13. Guatemala, miércoles 6 de agosto de 2008.

Libros más vendidos en julio 2008

SOPHOS

Pequeña historia de viajes, Amores E Italianos, Dante Liano, Roca Editorial.

Guatemala, la historia silenciada, Tomo II, Carlos Sabino, FCE.

La Tragedia de la Embajada de España en Guatemala, 31 de enero de 1980, Jorge Lujan Muñoz, Magna Terra Editores

Tattoo, Ruben Chaven, Ediciones Polymita.

"Guatemala: linaje y racismo": Marta Elena Casaús Arzú, F&G Editores.

Las 48 leyes del poder, Robert Greene, Atlántida.

Guatemala, La historia silenciada, Tomo I, Carlos Sabino, FCE.

De los maras a los Zetas, Jorge Fernández Menéndez Víctor Ronquillo, Grijalbo.

The art Of political murder, Francisco Goldman, Grove Press.

Los detectives salvajes, roberto Bolaño, Anagrama.

Fuente: SOPHOS

elPeriódico. Pág. 15. Guatemala, martes 7 de octubre de 2008.

Los libros más vendidos en septiembre de 2008

SOPHOS

Cuentos Chinos, Andrés Oppenheimer, Debolsillo.

Guatemala, La historia silenciada tomo II, Carlos Sabino, Fce.

Guatemala, La historia silenciada tomo I, Carlos Sabino, Fce.

Los locos mueren de viejos, Vanessa Nuñez Handal, F&G Editores.

El despertar del alma, Enrique Gómez Carrillo, Editorial Cultura

Retrato del artista adolescente, James Joyce, Alianza

La tierra es plana, Thomas Friedman, Martínez Roca

"Guatemala: linaje y racismo": Marta Elena Casaús Arzú, F&G Editores.

La Tragedia de la Embajada de España en Guatemala, 31 de enero de 1980, Jorge Lujan Muñoz, Magna Terra Editores

Genocidio: ¿La máxima expresión del racismo en Guatemala?, Marta Elena Casaus Arzú, F&G Editores

Fuente: SOPHOS

Diario La Hora / Revista de libros. Pág. 8. Guatemala, sábado 25 de octubre de 2008.

 

Poniendo rostro al racismo:
Una conferencia de Marta Elena Casáus
Por: Vanessa Núñez Handal

En julio de este año, con ocasión de la Feria Internacional del Libro en Guatemala, tuve la oportunidad de asistir a una conferencia impartida por Marta Elena Casaús, sobre su libro "Guatemala: linaje y racismo", publicado por F&G Editores (2007), y que se ha convertido en un best seller en Guatemala.

El evento me sorprendió, no sólo por el interesante planteamiento de la autora, sino por haber sido el más concurrido de la Feria. Mismo que, pese estar programado para una duración de una hora, debió extenderse el doble ya que las preguntas y comentarios de la audiencia no cesaban.

Se trata, sin lugar a dudas, de un libro inteligente, que refleja una investigación y conocimiento profundo del tema, pero, sobre todo, la intención de hacerlo accesible a todos. La obra, que no tiene recovecos donde el lector pueda perderse o dudar, dice las cosas como son.

Se trata de ideas que nos han abrazado siempre, como una camisa de fuerza, pero de las que nadie ha querido hablar nunca; porque es obvio, porque es así, porque es lo lógico. En este contexto, la mencionada autora dice en su obra: "Los certificados de limpieza de sangre, el argumento de pureza de sangre serán claves para el mantenimiento de la red familiar, así como las estrategias matrimoniales que dichas familias van a emplear para mantener su status." Y, sin embargo, en nuestro entorno, leer esta frase puede sonar teórico, un poco muchas palabras para algo que todos sabemos. Pero cuando la autora profundiza, como lo hizo en su charla, que el factor del racismo no es sólo un prejuicio más con el que tenemos que vivir, sino un factor determinante para la comisión de crímenes terribles en nuestros países (e incluyo el mío: El Salvador), la situación cambia.

El tema del racismo es un tema importante. No se trata tan sólo de una diferencia en cuanto a la concepción de "el otro". Se trata de ventilar la concepción que tenemos de nosotros mismos y la forma en que, anulando, destruyendo, eliminando al otro, buscamos reafirmarla.

"Cuando uno tiene un cáncer, pues es un cáncer", dijo la autora al final de su ponencia. No se llama grano o roncha. Llamemos, pues, a las cosas por su nombre.

Esperaremos con ansia cualquier futura publicación de Marta Elena Casaús, porque sus ideas están poniéndo forma a la angustia que nosotros, como mestizos, venimos arrastrando desde que, gracias a la cruz y a la espada, comenzamos a disculparnos por ser quienes somos.

Vanessa Núñez Handal es una catedrática universitaria y escritora salvadoreña radicada en Guatemala. Su más reciente novela es "Los locos mueren de viejos" (Guatemala: F&G, 2008)

elPeriódico. Pág. 15. Guatemala, miércoles 4 de marzo de 2009.

Los libros más vendidos en febrero 2009

SOPHOS

El Sueño de los justos, Francisco Pérez de Antón, Alfaguara.

Popol Wuj, Sam Colop, Cholsamaj.

Crepúsculo, Stephenie Meyer, Punto de lectura.

Gomorra, Roberto Saviano, Debate.

Guatemala, La historia silenciada tomo I, Carlos Sabino, Fce.

"Guatemala: linaje Y Racismo": Marta Elena Casaús Arzú, F&G Editores.

La Tragedia de la Embajada de España en Guatemala, 31 de enero de 1980, Jorge Lujan Muñoz, Magna Terra Editores

Guatemala en llamas, Gustavo Adolfo Díaz López, Oscar de León Palacios.

Guatemala, La historia silenciada tomo II, Carlos Sabino, Fce.

Twilight, Stephenie Meyer, Little, Brown.

Fuente: SOPHOS

www.heraldo.es / Los desastres de la guerra. Domingo 8 de marzo de 2009.

GUATEMALA: LINAJE Y RACISMO
Por: Gervasio Sánchez

Guatemala: Linaje y Racismo es un extraordinario libro escrito por Marta Elena Casaús Arzú, publicado por primera vez en 1992 y reeditado en 2007. Todo guatemalteco debería leerlo para conocer quiénes han sido los constructores de su país y cómo piensan. De esta manera entendería por qué Guatemala siempre ha estado encadenada a un reguero de sangre, violencia y explotación. Por las mismas razones todo español debería leerlo para conocer cómo actúan nuestros compatriotas cuando no existen luz y taquígrafos.

Antes de desgranar el magnifico libro quiero presentar a la autora perteneciente a una de las redes familiares, los Arzú, que describe en el libro. Uno de sus miembros, Álvaro Arzú es hoy alcalde de la capital después de haber sido presidente de la república hace una década. Sin esa relación de la autora con la casta empresarial este libro hubiese sido imposible. Además, Casaús Arzú es Doctora en Ciencias Políticas y Sociología y profesora titular de Historia de América en la Universidad Autónoma de Madrid.

¿De qué va el libro? Es un completo estudio sobre las 22 familias más poderosas y la influencia que el racismo ha tenido en las estructuras de poder en Guatemala desde los tiempos de la Conquista. Estas familias, de las que cuatro proceden del grupo inicial de conquistadores, controlan en la actualidad la mayor parte de la industria, la agroexportación, las finanzas y el comerció. Además, la autora consiguió entrevistar a cien personas pertenecientes a estas familias.

El libro empieza explicando que las primeras encomiendas fueron repartidas entre los gobernadores y lugartenientes de Pedro de Alvarado, conquistador de Guatemala y que las primeras mujeres españolas llegaron en 1539 por lo que durante 15 años los conquistadores tuvieron relaciones con indígenas, de las que nacieron las primeras generaciones de mestizos, que luego adquirirían el estatus de criollos.

Alvarado vendió a estas primeras mujeres (“buena mercadería que no se me quedará en la tienda”, escribió) a sus correligionarios y recibió altas dotes por ellas. Entre 1577 y 1769, sólo se produjeron 49 matrimonios entre españoles e indígenas y 9 con negros libres. Las familias españolas se casaron entre ellas para acumular riquezas y también para preservar “la pureza de sangre”.

Las familias vascas más poderosas han llegado hasta nuestros días sin mezclarse. Siglos de pureza y linaje. Certificados de limpieza sanguínea. Algunos encuestados aseguran que “no tienen una sola gota de sangre indígena” y aducen el grupo sanguíneo “O” negativo, característica racial vasca, como prueba.

La autora muestra un informe escrito en 1810 que describe al mestizo “como menos útil por su innata flojera y abandono”. En otro documento de 1820 se dice lo siguiente: “El mestizo vive en la oscuridad sumergido en una vergonzosa ignorancia. Su género de vida excita al desprecio de muchos; por su falta de luces le aleja de la compañía de otros”.

En las encuestas realizadas para este libro los comentarios sobre los indígenas son similares. Un joven de 30 años, describe sus sentimientos después de visitar España: “Cada vez me identifico más con ella porque todo es blanco; sus pueblos son blancos, su gente blanca, huelen a blanco y no a carbón y leña como nuestros pueblos de indios”.

Un abogado y miembro de la Real Academia de España reflexiona: “La vida de un sujeto está programada por sus genes, que determinan su conducta y desarrollo. La transmisión genética de los indios es de una raza inferior. Los genes de la raza blanca son superiores y esa raza superior produjo grandes inventos y artistas, la otra no ha creado nada”.

La autora afirma que el estereotipo del “indio de la oligarquía actual no difiere mucho de aquel que se formó durante la Colonia. Los indios se siguen viendo como haraganes, perezosos y perversos. La mitad de los encuestados consideran que los españoles vencieron a los indígenas durante la Conquista porque estos pertenecían a una raza inferior.

El grupo más intolerante habla sin tapujos de la necesidad de exterminar a los indígenas. Uno dice: “Hubiera sido mejor exterminar al indio, esto habría producido una civilización superior. No exterminarlo fue un grave error y ahora lo estamos pagando”.

Un joven de 26 años opina: “Integrarlos no sería la solución, tampoco repartirles tierras, ni darles dinero, ni siquiera educarlos merece la pena. En el fondo yo soy un reaccionario, porque algunas veces me dan ganas de exterminar a todos los indígenas del atiplano”.

Un empresario piensa que “la única solución para esa gente sería una dictadura férrea, un Mussolini o un Hitler que les obligara a trabajar y a educarse, o los exterminara a todos”.

Otro, un ingeniero civil, agricultor e industrial, aporta su propia estrategia ciertamente menos sangrienta: “La única solución para Guatemala es traer sementales arios para mejorar la raza. Yo tuve en mi finca durante muchos añosa un administrador alemán, y por cada india que preñaba, le pagaba extra 50 dólares”.

Los encuestados sólo se vuelven humanos a la hora de hacer contratos laborales. El 60% contrataría a un indígena antes que a trabajadores de otras razas porque “son más obedientes, fieles, sumisos, no causan problemas” o porque “trabajan más y se les paga menos”.

Un estudiante de 19 años responde: “Siempre contrataría a indígenas porque se les puede exigir más, trabajan más, no protestan y la ley no los protege”. Y remata: “Se les debe pagar menos porque son seres inferiores”. Otro joven de 18 años va por el mismo camino: “No se les puede pagar más porque son ignorantes y no entienden lo que son las utilidades y cuando vienen las pérdidas no ganan y se encabronan”.

Las conclusiones del libro son demoledoras. La autora asegura que el racismo “es un elemento histórico-estructural que se inicia con la conquista y la colonización, se inserta en la estructura de la clase dominante y pervive hasta nuestros días”. Dice que “el prejuicio étnico-racial es a la vez un prejuicio de clase que a lo largo de la historia va configurando el imaginario racista del guatemalteco”.

El racismo ha estado y está estrechamente vinculado a la opresión, explotación, represión y humillación del pueblo indígena y “ha servido también de factor de desestabilización social y de división entre las clases subalternas, al plantear el divorcio entre indígenas y ladinos como algo inherente a la naturaleza humana, o como un elemento de origen divino o genético, generando de este modo una sobrevaloración del ladino frente al indígena”.

Con el indispensable libro de la profesora Casaús Arzú se entiende mejor la violencia cegadora que ha marcado las últimas décadas de Guatemala. La clase dirigente de este país ha promocionado el genocidio de los indígenas y ha utilizado a los aparatos represivos del Estado, repletos de mestizos y ladinos de la cabeza hasta los pies, para llevar a cabo una despiadada persecución.

Fuente: www.heraldo.es/blogs/gervasiosanchez/

Prensa Libre / Cultura. Pág. 52. Guatemala, viernes 5 de marzo de 2010.

 

Estos libros reúnen la historia, cosmovisión, imaginación y realidad de Guatemala

Obras de reciente EDICIÓN
Por: Redacción Cultura

En estas páginas, la tinta es el soporte para el conocimiento, la creatividad y la identidad guatemalteca.

Al lector le bastarán unos minutos para dejarse seducir por cada uno de estos libros.

Poesía, narrativa, investigación, memoria histórica y cosmovisión son los temas que se encontrarán en estas seis obras literarias, las cuales ofrecen una mirada más profunda a la historia del país y a su gente.

Los contenidos van desde un estudio que revela los detalles de una masacre hasta la verdadera interpretación de las predicciones mayas para el 2012. Pasamos también por una historia de ficción, que bien podría ser real, y la inspiración reunida de muchos poetas chiquimultecos.

GUATEMALA: LINAJE Y RACISMO

Marta Elena Casaús Arzú, autora de este libro, ofrece una investigación acerca del origen de la formación histórica de los grupos dominantes en países en vías de desarrollo. Esta obra tiene gran valor sociológico y político.

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